Un aneurisma es una dilatación anormal en la pared de un vaso sanguíneo, generalmente de origen congénito aunque en raras ocasiones también puede ser causado por traumatismos o ciertas infecciones. Su rotura ocasiona una hemorragia cerebral que se conoce como hemorragia subaracnoidea que puede tener trágicas consequencias en la persona que lo presenta. No se conoce exactamente su incidencia pero se estima que es de entre el 0.2 al 7.9% de la población mundial y sólo un 30% de los casos presentan mas de 1 aneurisma.
Generalmente los aneurismas se vuelven sintomáticos alrededor de los 40-60 años, siendo la presentación mas común la hemorragia subaracnoidea (HSA), presentando un dolor de cabeza intenso al momento de la hemorragia con o sin déficit neurológico. Otros signos y síntomas son raros, aunque algunos pacientes pueden presentar compresión de nervios craneales, cefaleas o convulsiones, entre otros.
Con el uso de los estudios de imagen no invasivos (TAC y RM) cada vez se diagnostican mas aneurismas incidentales. El riesgo de ruptura de un aneurisma se calcula entre el 1-3% anual acumulable desde el momento del diagnóstico, pero esto puede variar dependiendo de factores de riesgo de ruptura como el tamaño del aneurisma, la estabilidad hemodinámica del paciente, tabaquismo, presencia de zonas de fragilidad, etc.
Un 40% de los pacientes que presentan una HSA aneurismática mueren tras hemorragia inicial. Todos los aneurismas rotos deben ser tratados en cuanto las condiciones del paciente lo permitan, ya que existe un riesgo de resangrado alto en las siguientes 2 semanas lo cual conlleva una mortalidad superior al 70% de los casos. Ya sea un aneurisma incidental o un aneurisma roto, existen 2 alternativas de tratamiento, el tratamiento endovascular y la cirugía convencional.
En la actualidad, con las distintas técnicas y materiales de embolización, el 90-95% de los aneurismas es susceptible de tratamiento por embolización endovascular, el cual se ha demostrado que tiene menos riesgos y una recuperación más rápida frente al tratamiento quirúrgico abierto.